Camaras en los coches

Los fraudes relacionados con accidentes de tráfico han afectado tanto a Rusia que la solución pasa por incorporar una cámara en los salpicaderos de los coches, de esta forma todo queda grabado y el vídeo pasa a ser una prueba de los hechos. Si un conductor da marcha atrás, golpea nuestro coche y luego intenta acusarnos de que fuimos nosotros quienes le golpeamos a él, con la grabación se da fin al fraude y se demuestra nuestra inocencia.
Tal es así, que Алексей Дозоров, defensor de los derechos de los automovilistas de Rusia, dijo: “usted puede sentarse en el coche sin pantalones, pero nunca sin la cámara”. Todos los coches de Rusia llevan una cámara. Algunos datos señalan unas ventas en 2012 de 300.000 cámaras.
Las cámaras baratas y el consentimiento emitido por el Gabinete en 2009, dio a los conductores una manera para protegerse de los fraudes por muy poco. La cámara de la figura 1, por unos 100 euros y con una capacidad de 64 GB, graba en bucle, así nos aseguramos de tener el suficiente tiempo grabado antes y después del accidente.
Es indiscutible hoy en día la ayuda que supone la tecnología para defender nuestros derechos.